martes, 17 de abril de 2018

El andador no sirve para nada!!

https://www.facebook.com/madeartesco/videos/343127309456437/?t=4 Lo hemos dicho en otras oportunidades, no nos cansamos de repetirlo! Los andadores no solo no sirven para aprender a caminar, sino que perjudican y alteran el desarrollo normal de la motricidad y además pueden provocar problemas en sus pies y rodillas. Seamos multiplicadores de este mensaje, pasenlo a vecinos, amigos, parientes.

miércoles, 11 de abril de 2018

Aprender es casi tan lindo como jugar

 -Me voy a aprender a nadar. -Dice Silvina con la alegría de sus 6 años recién cumplidos.
-Vas a nadar? -interviene la hermana, tres años menor.
-No, voy a aprender a nadar.
-Yo también voy a jugar a la pileta.
-No es lo mismo. Yo voy a aprender a nadar, dice Silvina.
-Qué es aprender?
-Aprender es...como cuando papá me enseño a andar en bicicleta. Yo tenia muchas ganas de andar en bicicleta. Entonces...papá me dio una bici...más chica que la de él. Me ayudo a subir. La bici sola se cae, la tenés que sostener andando...
-A mí me da miedo andar sin rueditas.
-Un poco de miedo da, pero papá sostenía la bici. No se subió a su bicicleta grande y dijo "así se anda en bici..." No, él se puso a correr a mi lado, siempre sosteniendo la bici..., muchos días, y de repente sin que yo me diera cuenta, soltó la bici y siguió corriendo al lado mío...Entonces yo dije: Ah...! Aprendí!.
Una mujer, que escuchaba la escena desde lejos, no pudo dejar de mirar, la alegría del "aprender" pronunciado, que se había trasladado hasta el cuerpo de la más pequeña, y aparecía por el brillo de sus ojos.
Ah! aprender es casi tan lindo como jugar.
-Sabés, papá no hizo como en la escuela. No me dijo: "hoy es el día de aprender a andar en bicicleta".
"Primera clase: andar derecho. Segunda clase: andar rápido. Tercera clase: doblar. No tenía un boletín donde anotar: "muy bien", "excelente", "regular",...porque si hubiera sido así, no sé, algo en mis pulmones, en el estómago, en el corazón, no me hubiese dejado aprender".
La mujer psicopedagoga, que presenciaba la escena, nunca habia escuchado, ni leído, ni podido escribir, una explicación tan acertada del acto de enseñar y aprender.

Poner en Juego el saber. Ed. Nueva Visión. 2000. Alicia Fernández